La sala es el espacio de la casa en donde puedes desplegar tus instintos de diseñadora de interiores. Por lo general es la habitación reservada para ocasiones especiales en donde recibes a tus invitados más importantes y en ocasiones es un lugar funcional para convivir en familia y descansar. Dependiendo del uso que le quieras dar, su decoración juega un papel fundamental.
Primero, define cuál será el objetivo que le darás a este espacio: ¿es un lugar para ver películas, series y tus programas favoritos de TV?, ¿es un lugar de descanso y desconexión en donde impere la tranquilidad y el sentirse cómodo?, ¿o es más bien un rincón para charlar con la familia o los amigos de una manera informal? Cada uno determinará la posición y el tipo de muebles que elijas para su diseño.
A continuación te compartimos algunos consejos que te ayudarán a diseñar una sala de acuerdo a tus necesidades.
1. Considera el espacio y la forma del lugar
Si la habitación tiene dimensiones regulares, como cuadradas o rectangulares será sencillo ubicar los elementos en el diseño, pero si la forma del espacio es no simétrico, tendrás que buscar muebles que se ajusten al tamaño de las paredes. Lo mismo sucede con el tamaño del espacio. Si tu sala es pequeña, busca elementos también pequeños para que el espacio no luzca sobrecargado.
2. Elige un punto focal en tu diseño
Se trata de darle un punto de atención a tu espacio. Lo puedes lograr incorporando un elemento arquitectónico como una ventaja o una chimenea o puede ser una pieza de decoración como un cuadro llamativo o un mueble especialmente bonito que sirva para determinar los colores y el estilo de la decoración.
3. Busca el equilibrio
vc fPara balancear los elementos de una sala es importante dividir el espacio en secciones, de tal forma que los muebles se coloquen de forma equitativa evitando así espacios abarrotados. Existen dos formas de dar equilibrio a una habitación: el formal en donde se colocan lo elementos de forma simétrica y ordenada, por ejemplo, con sillones iguales encontrados; y el informal, que se consigue cuando a pesar de que los elementos son distintos, se mantiene un equilibrio visual entre ellos, por ejemplo con un sofá y varios sillones individuales.
4. Considera el tránsito de las personas
Visualiza de antemano el flujo natural de las personas mientras se mueven por la sala para que tengan el camino libre. Si el espacio lo permite, se recomienda agregar 90 centímetros libres delante de cada puerta y 30 centímetros de espacio delante de cada ventana.
5. Planea qué tipo de muebles y accesorios utilizarás
Haz una lista de los muebles y objetos para tu sala. Ya sea que vayas solo a redecorar o empezar de cero, saber de antemano qué elementos quieres incluir es crucial. Una lista base incluye: sofá de dos plazas, mesa de centro, mesa auxiliar, lámpara de pie, uno o más sillones individuales, mueble de tv si su función así lo requiere.
6. Traza un plano de distribución
Para que puedas jugar con los elementos del espacio, lo ideal es que traces un plano que te permita observar todas las posibilidades de acomodo. Lo puedes hacer con papel y lápiz usando medidas a escala o utilizar alguna aplicación de diseño de interiores para que aprecies de forma virtual cómo luciría el acomodo de los muebles.
Una vez que hayas considerado todos estos puntos, es momento de darle estilo propio a este lugar.
Necesitarás definir el color de las paredes correcto ya que este elemento es lo que transforma y le da personalidad a este espacio. Si tu sala es pequeña, elige tonos fríos como grises, azules o verdes neutros, ya que van bien con cualquier combinación de colores. Pinta los techos de un tono más claro para que las paredes parezcan más altas y el espacio más aireado.
No olvides integrar un elemento importantísimo de una sala: las cortinas. Elige unas que caigan hasta el suelo y cuélgalas lo más alto posible arriba de las ventajas, de 3 a 4 centímetros es una buena altura. Otra opción es poner persianas, elige un estilo que vaya acorde con los muebles de la sala y procura que éstas sean hechas a la medida para lograr una mejor armonía.
Selecciona muebles funcionales que te permiten almacenar libros o DVDs. Una mesa otomana o de café con cajones ocultos le da un toque de sofisticación a la pieza y se convierten al mismo tiempo en elementos decorativos que le dan sofisticación y distinción a tu sala.
Si está dentro de tu gusto, integrar un espejo grande le dará a tu sala la sensación de más espacio y refleja la luz de manera natural. Puedes colocarlo sobre el sofá grande, frente a una ventana o puedes poner varios espejos pequeños, de diferentes tamaños y formas para crear la sensación de un gran espejo. Esta es otra manera de crear un centro de atención en tu sala.
Con estos consejos y recomendaciones estás lista para emprender el emocionante proyecto de decoración de la sala de tus sueños. ¡Manos a la obra!